se ven rostros cansados
que emergen de noches maltrechas,
empeñados en enmudecer sueños
que reclaman otros cielos
mañanas sin inocencia
corren por las venas
empujando los caminantes
que todavía no tienen un destino
hay los que llevan la historia de su
vida
debajo del brazo
hay los que confundidos
han dejado de hacerse preguntas
hay el que arroja su destino al suelo y
lo pisa
y el que corre para recoger las
migajas,
hay el que se deja sostener por la vida
y va repartiendo brisa
y risas
hay el que despierta
No hay comentarios:
Publicar un comentario